Sin Novedad en el Frente

Cuando Erich María Remarque publicó su novela Sin Novedad en el Frente, en la que describía sus terribles experiencias como soldado en la primer guerra mundial, ya al año siguiente estaba siendo adaptada al cine en Hollywood, en la inolvidable versión de Lewis Milestone All Quiet in the Western Front (1930), mientras que en Alemania, si bien el libro se vendió, su autor fue tachado de antipatriota por los nazis que estaban ya a punto de tomar el poder, y más adelante tuvo que exiliarse primero en Suiza y luego en Estados Unidos, donde llegó casi en calidad de apátrida y se tuvo que nacionalizar estadounidense.

Su obra estuvo pues prohibida muchos años en Alemania y otros países de Europa. Por eso ya era hora que el país se reconciliara con el autor (casi 100 después), y adaptara su obra cumbre en una película totalmente made in Germany. 

Pues bien, ese trabajo le ha tocado a Edward Berger director nacido en Wolfsburgo pero formado en Nueva York, donde realizó sus primeros cortos. Aunque su trabajo se ha centrado más en la televisión, tiene un largo interesante que obtuvo buenos comentarios: Jack (2014), sobre un niño que se queda en la calle con su hermano pequeño.

Im Westen Nichts Neues (que quiere decir algo así como: No hay noticias en el Oeste), comienza adentrándonos de frente en el horror de la guerra, con una batalla de trincheras en el lado francés, mostrada con un gran realismo, gracias al buen uso de la tecnología de los efectos especiales.

Luego nos lleva a conocer a Paul y sus amigos, quienes debido a las fanáticas arengas de su profesor están tan entusiasmados por ir a la guerra, que hasta falsifican sus papeles para alistarse. Pronto se darán cuenta que a donde van no es un juego de niños. Berger nos muestra con bastante crudeza toda la horrible realidad de una guerra no solo en su aspecto deshumanizador y desquiciante, sino también en lo absurdo de morir por causas tan etéreas y absurdas como el nacionalismo.

En ese sentido, esta versión de Berger incide un poco más en lo absurdo, al incluir escenas donde vemos a los políticos de ambos bandos negociando un armisticio, mientras que en el campo de batalla, un general "patriota" quiere "aprovechar" los últimos minutos antes del cese del fuego para enviar a sus jóvenes sobrevivientes a una misión suicida, algo que nos recuerda el argumento de Paths of Glory (1957) de Stanley Kubrick, otro excelente film ambientado en la primera guerra mundial.

Si bien no es del todo fiel a la novela, y excluye algunas partes que sí estaban en la versión de Milestone, esta versión alemana de Sin Novedad en el Frente es una película digna, no solo por su impecable factura técnica y buenas actuaciones, sino también por su necesidad: tanto para rescatar la obra antibélica por excelencia para el pueblo alemán, como también para que en estos momentos de nacionalismos exacerbados y falsos patriotismos, se recuerde el destino inevitable a donde conducen esos desvaríos.