La Piel más Temida

 Joel Calero es un director, guionista y profesor de cine cuyas dos películas más conocidas (Cielo Oscuro, 2012 y La Última Tarde 2016) son sobre relaciones de pareja, aunque en esta última se agrega además el hecho de que la pareja está conformadas además por dos ex miembros de un movimiento subversivo, quienes se encuentran años después de su abrupta ruptura.

En esta ocasión vuelve a centrarse en las relaciones, pero no de pareja sino familiares, aunque el tema del terrorismo sigue presente pues se trata de la segunda parte de lo que más adelante será una trilogía (o tetralogía como ha mencionado en alguna entrevista) dedicada al terrosimo en el Perú.

La cinta cuenta la historia de Alejandra, una joven que regresa a Cusco luego de 22 años para ver temas relacionados con la herencia de su madre que ha fallecido recién. Allí descubrirá casi de casualidad, que su padre está vivo y que además está preso por terrorismo. Sorprendida por la noticia ella y luego de reclamarle a su tío por esta omisión, ella decide conocer a su familia materna.

De esta forma conocerá a Dominga, su abuela, quien tras mostrarse hosca y desconfiada al inicio luego irá cambiando de opinión con respecto a su nieta, y le presentará a su padre, un hombre con una enfermedad terminal, quien a diferencia de la abuela, mantendrá siempre hasta sus últimos días la misma indiferencia frente a la hija, a pesar que esta logra un indulto por la delicada condición de su padre.

Como en todo film dedicado a las relaciones humanas, son muy importantes las actuaciones, y en este caso destaca plenamente la modelo Juana Burga, quien a pesar de su corta experiencia en cine logra con sobriedad componer un personaje convincente, sobre una peruana que ha crecido toda su vida en el extranjero e intenta conectar con su realidad y descubrir sus raíces.

El resto de actores principales y secundarios, como Luis Cáceres o Amiel Cayo también cumplen su tarea, pero de entre  todos ellos la que destaca nítidamente es María Luque, quien encarna a Dominga, y luce sumamente creíble en la evolución de su personaje: que parte de una abierta hostilidad hacia la recién llegada a quien ve como una extraña, pero a la que luego va aceptando y tranforma esa hostilidad en cariño y ternura maternal.

El director y guionista Joel Calero, logra también contar una historia sólida, bien estructurada, que muestra realidades del Perú que todavía algunos se resisten a contar y otros a aceptar porque en su visión polarizante solo existen buenos y malos.

Esperemos que la siguiente parte de la trilogía: Album de Familia no se tarde los 8 años que se tardó este proyecto  y que pueda estar tan bien narrada como esta La piel más temida.